viernes, 20 de junio de 2008

"¡Son iguales!"


IVANA PADIERNA
Barcelona


OPEN SABADELL ATLÁNTICO-TROFEO CONDE DE GODÓ. GEMELOS ÚNICOS.
Los hermanos Bryan ya piensan en la Copa Davis ante España

Una muchedumbre en la edad de la inocencia se amontona a las puertas de la sala de jugadores del Real Club de Tenis Barcelona. Alguien les ha dado el chivatazo de que por aquí va a salir Rafa Nadal para dirigirse a una rueda de prensa. Los chavales atienden ansiosos en fila india, dejando el espaciomínimo necesario por donde escapará su ídolo. Le hacen el pasillo al verdadero campeón. Al cabo de unos minutos de espera, parece que emerge alguien por la inaccesible puerta custodiada por tres polis. Los niños, asombrados, no reconocen al personaje. "¿Cómo te llamas? ¿Has ganado?", le pregunta un caza autógrafos al misterioso jugador, que tiene toda la pinta de no entender la petición del chaval. "¡Hay dos! ¡Son iguales!", exclama una réplica en miniatura de Maria Sharapova. La niña lleva toda la razón. Hay dos y son iguales. Son Mike y Bob, más conocidos como los hermanos Bryan, que cumplieron 30años el pasado martes. La mejor pareja de dobles del mundo durante los últimos tres años. Unos minutos de observación en la pista 3 dan fe del imponente tándem que forman los gemelos californianos. Se percibe, aunque sea por la envidiable seguridad con la que saltan a la pista (salen brincando, literalmente), que los brothers cultivan desde sus inicios una palpable telepatía. Dedicando unos segundos a examinar sus fugaces gestos, se aprecia una tremenda conexión entre los Bryan. "Cuando él me mira, ya sé lo que está pensando", asegura Bob ante el asentimiento de cabeza de su inseparable Mike. "La verdad, no sé qué leyó en mi mente cuando tiraba todas esas bolas fuera", replica éste, aguantándose la risa. Pero cualquiera que les haya visto jugar sabe que se trata de un simple cachondeo –ese que les caracteriza fuera de la pista–, porque a la hora de la verdad los twins se adivinan los golpes con una facilidad que asusta. Ayer le tocó a la pareja Chela-Cuevas (6-1, 6-2) comprobar la vertiginosa complicidad que une a este llamativo tándem. El miércoles fueron Calleri y Starace. Su juego es simple. Pero no por fácil, sino por altamente rítmico y en sintonía. Ni un marcador en contra, ni una superficie tabú para un par de americanos les apartan de invertir el resultado y salir victoriosos. "Jugar en tierra no es un problema, el problema son los españoles, que en esta superficie son muy peligrosos", explica Mike mirando de reojo al próximo duelo de Copa Davis ante España. "Pero tener un rival duro nos motiva. Nos gusta competir", dice Bob, al tiempo que comparte una manzana con su igual. Y, aunque está claro que los Bryan llevan la competición a su ritmo, aseguran que tienen todavía más feeling tocando juntos en su grupo musical Bryan Bros Band, donde Mike toca la batería mientras Bob hace sonar los teclados. "Tocamos por pura diversión, porque nuestro trabajo serio lo hacemos en la pista", indica
Mike antes de que Bob, entre risas, le apague el micrófono. Un buen rollo que alcanzaría sus mayores alegrías si los Bryan consiguieran el oro en los Juegos Olímpicos. "La medalla es algo mucho más especial que ganar otro Masters Series –poseen ya 45 títulos–. Sería un sueño hecho realidad", confiesan.

jueves, 19 de junio de 2008

Rebelión en la Copa Davis


IVANA PADIERNA
Barcelona

Alta tensión en la Federación Española de Tenis. Por un lado el presidente, Pedro Muñoz. Por el otro, el capitán, Emilio Sánchez Vicario. Por un tercero, los jugadores. La elección de la sede de semifinales de la Copa Davis ha provocado un conflicto interno de gran voltaje. Los tenistas, dispuestos a rebelarse, acusan al presidente de incumplir su promesa de que la eliminatoria se celebraría en las condiciones que ellos quieren (en una ciudad que esté al nivel del mar), el capitán denuncia que Muñoz quiere llevarse el duelo contra Estados Unidos a Madrid (a 650 metros sobre el nivel del mar), y el presidente se defiende pero reconoce que quizás no pueda cumplir con la palabra dada. Hasta tal punto hay un conflicto que Emilio, que según la Federación no ha presentado su dimisión, voló ayer a Roma, donde anoche tenía previsto reunirse con los jugadores. En Bremen, tras doblegar a Alemania, los tenistas recibieron la promesa de que se les tendría en cuenta para la eliminatoria que se disputará del 19 al 21 de septiembre. Los jugadores, satisfechos de poder tener voz en la decisión, pusieron dos únicas condiciones: jugar al aire libre y al nivel del mar. Pero su petición no se está teniendo en cuenta, tal como se acordó previamente. Ya que, aunque habrá que esperar al próximo viernes para conocer el nombre de la sede oficial donde se jugará el campeonato (Tenerife, Gijón, Madrid o Benidorm), todos los dedos apuntan a Madrid. "Que Madrid tenga más oportunidades
es una absoluta falsedad. No hay el más absoluto compromiso con ninguna de las ciudades candidatas", se empeña en aclarar Pedro Muñoz. Pero considerando la valoración que él mismo hace sobre la importancia de las áreas económica, política y social, la capital española es la que tiene más puntos, con la plaza de Las Ventas. El presidente está recibiendo presiones y Madrid es la que más dinero ofrece (1,5 millones, por los 750.000 mínimos requeridos). Sólo hay un problema, y es que Madrid es la única de las cuatro ciudades seleccionadas que no cumple el requisito demandado
por el equipo. Jugar en Madrid supondría perder una ventaja frente al equipo estadounidense, que se caracteriza por tener un saque tremendamente rápido, y además, jugando al nivel del mar, las bolas pierden velocidad, factor que favorecería a España. Viendo la que se les viene encima, los jugadores no están contentos. Se sienten engañados por su presidente. Traicionados. La traición ha puesto a los jugadores en pie de guerra. El capitán del equipo español, Emilio Sánchez Vicario, viajó ayer a Roma para apaciguar el ambiente entre los tenistas. Algunos planteanuna situación límite: el presidente o los jugadores, mientras otros
están dispuestos a jugar donde sea siempre que el presidente asuma la culpabilidad de una posible derrota. "Las negociaciones están en un punto complicado –explica Sánchez Vicario–, el problema es que el presidente nos ha dado la palabra de que nos
escucharía. Si él ahora quiere tomar una decisión sin escucharnos, que lo asuma", sentencia el capitán. El conflicto está ahora bastante lejos de cerrarse.

Primavera en Praga


Treinta años después, Martina Navratilova (51) vuelve a ser checa. Recuperará sus orígenes sin perder sus privilegios actuales. La ex número uno mundial de tenis –lo fue durante 331 semanas, entre 1978 y 1986–, que había solicitado la nacionalidad checa la pasada primavera, aseguró ayer que también mantendrá el pasaporte estadounidense para disponer de la doble nacionalidad. Según explicó ayer en Tokio,
Navratilova había emigrado a Estados Unidos en 1975 para impulsar su carrera, ante la prohibición de la federación checa para jugar en Estados Unidos, país en el que, recuerda, "en aquel entonces tenían lugar el 90% de los torneos". Era el tiempo de la guerra fría. Retirada del circuito en el 2006, Navratilova ofrece hoy partidos mixtos y de exhibición. El próximo sábado se enfrentará a la que fue una de sus
eternas rivales, la alemana Steffi Graf. Encuentro que, confiesa la tenista, le produce "mariposas en el estómago". "Para este público, lo que importa no es que ganes o no, sino que juegues bien", dijo. Lo que no le provoca nervios, pero sí malestar, son los gritos que algunas jugadoras emiten en la pista de juego. Sonidos que la histórica tenista considera que "no son necesarios y deberían estar prohibidos
por las autoridades del tenis". "Molestan y distraen". A pesar de que gritaba, Navratilova no reprime halagos hacia Monica Seles, según ella una de sus rivales más duras de su trayectoria. "Aunque mi peor adversaria era mi abuela: jugué con ella
cuando era pequeña".